Los disolventes son compuestos químicos empleados para disolver o extraer un material sin afectar la composición original de este ni la composición propia; también puede utilizarse para disolver suciedad. Los disolventes pueden tener una gran variedad de usos en la industria química, en la farmacéutica, en la industrial, etc. Hablaremos sobre los usos más comunes de los disolventes.

Al utilizar un solvente suele encontrarse en fase líquida; su uso, aunque poco conocido es de gran valor, ya que puede ofrecer un mejor desempeño a ciertos productos que no funcionarían igual sin un solvente; y que además, necesitamos a diario, como por ejemplo productos de belleza e higiene personal, productos de limpieza, pinturas, etc.

Principales usos de los disolventes

Son muchos los productos de uso cotidiano que requieren el uso de disolventes para poder funcionar de la forma correcta; y así simplificarnos y facilitarnos nuestras actividades diarias.

En pinturas y recubrimientos

Cuando se trata de pinturas y recubrimientos, los disolventes juegan un papel muy importante; ya que actúan sobre los componentes utilizados en la fórmula de la pintura, logrando que adquieran la consistencia precisa; esto es lo que evita la creación de grumos al utilizar la pintura; así que los disolventes son esenciales, de lo contrario, gran parte de la pintura se perdería.

Específicamente, los disolventes llamados ésteres de glicol se agregan a las pinturas en spray; son utilizados para evitar que la pintura se seque al entrar en contacto en el aire; esto permite que puedan efectuarse varias aplicaciones de la pintura sin grumos y así se obtendrá un mejor acabado, totalmente resistente.

El tratamiento de los disolventes, como cualquier otro químico, requiere de ciertas medidas de seguridad; si bien se pueden adquirir los solventes en algunas tiendas, sean online o físicas, se trata de productos terminados que pueden ser utilizados con fines domésticos; y también existen sitios determinados que se encargan de procesar estos disolvente de acuerdo a la función deseada; por ejemplo existen una gran variedad de empresas de disolventes en Madrid.

Usos de los disolventes en los productos de higiene y cuidado personal

Cuando se trata de los productos cosméticos y de higiene, se realizan a base de disolventes que activan los diferentes componentes; y permiten que en conjunto puedan funcionar de la forma adecuada. Por ejemplo, pueden brindar la contextura, olor, color, consistencia, entre otras características que se esperan. Algunos ejemplos de disolventes utilizados en cosméticos son: en los perfumes se utiliza etanol como disolvente, para regular el olor del mismo en la piel.

El acetato de metilo es utilizado como disolvente en los esmaltes de uñas, logrando que al utilizarlas tengan un secado rápido; lo que a su vez garantiza un acabado limpio, bonito y además le da mayor durabilidad al esmalte. El mismo acetato de metilo también se emplea en los removedores de esmalte; en este caso actúa como solvente al lograr que el esmalte se retire de forma rápida y sencilla de las uñas.

En los productos de limpieza

Los disolventes llamados éteres de glicol se utilizan como uno de los principales componentes en las fórmulas de limpieza para vidrios, cocinas, pisos, baños, etc. Una gran ventaja es que este tipo de disolvente es compatible con el agua y puede disolver fácilmente la grasa; esto quiere decir que podemos limpiar hasta las superficies más difíciles sin esfuerzo, así que no imaginamos la vida diaria sin estos componentes. Otra característica de los disolventes empleados en productos de limpieza es que son biodegradables; así que su uso es seguro y no afecta el medio ambiente.

También son seguros de manipular y resultan muy eficientes en el proceso de limpieza; además, gracias a que contienen bajo nivel de olor, son ideales para cuidar nuestra salud y evitar alergias y otras afecciones cutáneas y de las vías respiratorias; especialmente en personas más sensibles, es por eso que vemos cómo cada día la industria presenta productos que cuidan la piel, el medio ambiente y son eficientes.

Usos en productos farmacéuticos

La gran mayoría de los medicamentos utilizan en su fórmula algún tipo de disolvente; como, por ejemplo, el acetato de butilo, que aísla las impurezas de la penicilina, logrando purificarla y que se extraiga selectivamente de forma segura. De la misma manera los medicamentos que comúnmente utilizamos como jarabes para la tos, calmantes, antialérgicos, etc., requieren el uso de disolventes.