Si has realizado compras por internet, lo más probable es que te hayan pedido que indiques una dirección de facturación. En el caso de que no conozcas muy bien lo que eso significa, te invitamos a que sigas leyendo este post ya que más adelante explicaremos qué es una dirección de facturación.

A pesar de que las compras en línea se han puesto de moda, ya que es un proceso muy fácil y sencillo que podemos realizar desde la comodidad de nuestro hogar, muchas personas aún no confían en este método. Principalmente esto se debe a que los usuarios tienen miedo de que sus datos bancarios sean usados por terceros para robar dinero de sus cuentas; lo cual lamentablemente ha sucedido con frecuencia a nivel mundial.

Significado de la dirección de facturación

En resumidas cuentas, es una dirección que se encuentra vinculada a tu tarjeta de crédito; y sirve para comprobar si la información dada por el cliente es fidedigna o no, y así poder evitar fraude bancario. A su vez, esta indica el lugar donde reside el titular de la tarjeta de crédito o el sitio donde trabaja. Lo importante es que la dirección coincida con la que está registrada en el banco emisor de la tarjeta de crédito; de lo contrario podremos sospechar de una estafa.

Anteriormente era común que las compañías enviaran mensualmente a los clientes un resumen de los gastos de su tarjeta de crédito. De allí proviene el uso de dicha dirección; ya que también se usaba como una manera de verificar cómo puede el banco establecer un contacto con el cliente. En el caso que poseas una empresa o sociedad, la dirección comercial y la dirección de facturación deben ser las mismas. Sin embargo, en circunstancias excepcionales, esto puede variar; pero no es algo que ocurra de manera frecuente.

En la actualidad es casi imposible hacer una compra sin indicar la dirección de facturación; ya que de esta forma al vendedor se le hace posible corroborar la información del cliente. A su vez, se debe confirmar que el código postal coincida con la tarjeta y también el número telefónico de su hogar debe coincidir. Sin embargo, en algunos casos puedes especificar si ese es tu lugar de residencia o no; pero generalmente no tienes porque aclarar esto.

Datos que debes incluir

A continuación te hablaremos sobre los datos que debes incluir en la dirección de facturación; ya que muchas personas se equivocan al momento de transcribirlos. Para evitar problemas en un futuro, debemos corroborar al menos dos veces que hemos ingresado los datos correctamente; ya que a veces puede haber algunos errores ortográficos; o simplemente podemos colocar un número donde no debería ir.

Entonces, en la dirección de facturación debe ir el nombre de inmueble, el número de piso, el nombre o número de la calle donde vives y el número de servicio postal. Adicionalmente tienes que ingresar el nombre de tu localidad, ciudad, o estado y país. A su vez debes asegurarte que estos datos corresponden con los que posee el registro del banco.

Es común que todos los países exista un organismo gubernamental que sea el encargado de llevar un registro vinculado con las direcciones fiscales. Este se puede utilizar como referencia para demostrar si una dirección es verdadera o no. Sin importar si es un piso al cual se acaban de mudar o si es un negocio que ha sido inaugurado; en cualquier caso la documentación debe hacerse para que dicha dirección exista y sea reconocida.

Usos de la dirección de facturación

Generalmente las empresas usan esta dirección para comprobar el uso autorizado de las tarjetas de crédito; y también a esta dirección son enviadas las facturas en físico y los extractos bancarios. Es por ello que los datos deben ser iguales a los que posee el banco emisor de la tarjeta en su registro oficial.

Por otro lado, en el caso de que el titular de la tarjeta cambie su dirección debido a una mudanza, debe ponerse en contacto de forma inmediata con el banco; para actualizar sus datos y así evitar problemas legales.

Adicionalmente con esta dirección se busca demostrar la autenticidad de los datos para poder detectar algún fraude y limitar el uso de dicha tarjeta. En este sentido, algunos vendedores han implementado protocolos de alto nivel de seguridad para verificar la identidad de los compradores; ya que es común que algunas personas utilicen tarjetas de crédito robadas para aprovecharse y hacer las compras con dinero ajeno.